Sin embargo, en la era del greenwashing, a veces no es fácil distinguir qué marcas y compañías están generando un verdadero cambio y cuáles solo toman medidas superficiales. Por eso, también han aflorado distintos sellos sostenibles y certificaciones que garantizan el compromiso con el impacto positivo. Estos son algunos de ellos.
Aenor
Estas siglas, que seguro que has visto en un montón de sitios, responden a una certificación de calidad con las normas vigentes en materia ambiental. Con ella, se demuestra que la empresa a la que se le concede pasa los procedentes controles y evaluaciones y que AENOR confía en que sigue la norma UNE-EN ISO 14001, que marca las pautas que debe seguir el sistema de gestión ambiental de una organización, de cualquier sector y tamaño. Así, este sello AENOR de Gestión Ambiental permite a la organización demostrar que una empresa ha implementado un sistema eficaz para gestionar esos asuntos y mostrar su compromiso con la preservación del entorno.
BCorp
Uno de los sellos sostenibles más reconocidos en los últimos años es el de BCorp, que certifica que una empresa cumple los más altos estándares en cuanto a impacto social y medioambiental, transparencia y responsabilidad legal a nivel interno y externo.
Al mismo tiempo, que un producto tenga este sello indica que la empresa que lo lanza asume los valores y objetivos de la comunidad BCorp y que ha pasado sus estrictas evaluaciones en cuanto a indicaciones ESG. Con ello, hace una declaración de intenciones de ser una de las mejores empresas para el mundo, conociendo la interdependencia con los demás y poniendo el foco en legar un planeta mejor a las futuras generaciones. En España, más de 100 empresas forman ya parte de este movimiento que, a nivel mundial, supera las cinco mil compañías.
Fairtrade
Con este sello, se señala que un producto cumple los estándares de comercio justo, algo coordinado por la organización internacional FLO. Esta certificación sirve para garantizar que las condiciones de producción y de comercio de algo son social, económica y medioambientalmente responsables y que sus productores han percibido un precio que cubre razonablemente sus costes.
Casi dos millones de agricultores en todo el mundo trabajan bajo este sistema enfocado en la justicia social y ambiental. Hoy, más de 37.000 productos cuentan con este sello, que puedes encontrar en camisetas, café, chocolate o fruta, por ejemplo.
Cradle to Cradle
Aunque en nuestro país no es tan conocido, el sello sostenible C2C (Cradle to Cradle, «de la cuna a la cuna») es uno de los más importantes en materia de economía circular. Es un sistema que impulsa la innovación en productos sostenibles, ya que se le entrega únicamente a productos que usan materiales seguros y sanos para el medio ambiente, que implementan la reutilización de materiales con el objetivo de reducir al mínimo los desechos. Además, al tratarse de un sello que responde a múltiples criterios, también tienen en cuenta el uso de energía renovable, el uso eficiente del agua y siguen diferentes estrategias de impacto y responsabilidad social.
Empresa solidaria
El Sello Empresa Solidaria acredita a aquellas empresas que buscan generar un impacto positivo en la sociedad marcando la Casilla Empresa Solidaria del Impuesto de Sociedades. Con esta certificación, se indica que una compañía es socialmente responsable y defiende un modelo de negocio responsable que genera un impacto social positivo y que genera beneficios que trascienden lo económico.
El sello, otorgado por la Plataforma del Tercer Sector, solo puede conseguirse si se ha marcado la Casilla Empresa Solidaria, con la que se destina el 0,7% de la tributación de una empresa a financiar proyectos y actividades de interés social desarrollador por entidades del Tercer Sector.
¿Quieres saber más sobre el Sello Empresa Solidaria? Te lo contamos aquí.